La decisión ya fue publicada en el Boletín Oficial y argumenta que Martín Biscay «mediaba una mala conducta e incumplimiento de los deberes de funcionario público».
Pedro Biscay fue desplazado de su cargo como director del Banco Central, por «mediar mala conducta e incumplimiento de los deberes de funcionario público». Se trataba del último dirigente kirchnerista que tenía un puesto en la entidad.
Así lo dictaminó ayer una comisión bicameral en el Congreso y la medida ya está publicada en el Boletín Oficial, con las firmas del presidente Mauricio Macri, el jefe de Gabinete, Marcos Peña, y el ministro de Hacienda Nicolás Dujovne.
En diálogo con C5N, el abogado de 38 años declaró que «estamos viendo un ataque claro a la libertad de pensamiento y de opinión que están expresamente protegidas en los tratados internacionales de derechos humanos y en la legislación argentina desde que en nuestra Constitución se establece el derecho de publicar las ideas por la prensa»
Con fuertes lazos al Gobierno anterior, Biscay fue designado en agosto de 2014 por el entonces ministro de Economía, Axel Kicillof, y tenía mandato hasta 2019. Según el decreto, «existen variados y consistentes elementos de juicio que determinan la violación de la Carta Orgánica del Banco Central de la República Argentina por parte del señor Pedro Martín Biscay».
Puntualmente, es acusado por el oficialismo de realizar «afirmaciones que ponen en riesgo los objetivos establecidos» en la Carta Orgánica del Banco, «particularmente en lo que se refiere a la estabilidad financiera en un sistema bancario de encajes fraccionarios y en el marco de un país que ha atravesado múltiples crisis cambiarias y bancarias en las últimas décadas».
Hasta ha publicado una serie de artículos financieros, particularmente en el diario Ámbito Financiero, en los que daba su catarsis sobre la política monetaria del Gobierno y advertía la cercanía a una crisis.